El modelo de White Label para empresas tecnológicas ha conquistado su espacio porque, entre sus múltiples ventajas, rompe con un viejo paradigma: la necesidad de mantener un equipo de desarrollo.
Por definición, el término tecnología está asociado con la desarrollo herramientas capaces de resolver problemas.
Desde esta perspectiva, las empresas tecnológicas también están asociadas, casi exclusivamente, al desarrollo de herramientas, productos o servicios.
Sin embargo, con White Label esto ya no es un requisito para las empresas de tecnología. Especialmente para los más pequeños, que pueden no tener suficiente estructura física o financiera para mantener un equipo o soportar los altos costos que implica.
Pero, para que este modelo de negocio cumpla su función y resulte realmente eficaz para las empresas, es necesario tener en cuenta algunos puntos.
Te invito a seguir leyendo para lograr una comprensión más completa.
¿Cómo White Label dispensa la necesidad de desarrollo?
Para entender cómo White Label prescinde de la necesidad de desarrollar una nueva tecnología, es necesario saber cómo funciona.
En este modelo de negocio participan al menos dos empresas. El primero es desarrollador de software y el segundo adquiere y comienza a revender el producto digital desarrollado por el primero.
Es decir, el desarrollo todavía ocurre, obviamente. Pero lo llevan a cabo empresas que tienen el tamaño y la experiencia específica para eso. Esta función se vuelve prescindible para el resto de empresas tecnológicas involucradas en el negocio, normalmente de menor tamaño o con otro foco de actuación.
Normalmente, los productos digitales exigen muchas horas de trabajo colectivo entre varios profesionales, incluidos programadores, diseñadores e ingenieros de software.
Es en este punto donde reside reside el gran potencial de la White Label, que amplía las posibilidades de operación de varias empresasque ahora cuentan con tecnología de punta en sus portafolios, pero no tienen que manejar con los altos costos que implica el mantenimiento. un equipo multidisciplinar para la investigación y el desarrollo de productos.
Otro gran diferencial es la posibilidad de personalización de la marca. O sea, el producto lleva el nombre de la empresa que lo revende, no quien lo desarrolló.
Estas son solo algunas de las ventajas de White Label para las empresas tecnológicas. Para comprender mejor su funcionamiento y conocer todas sus ventajas, lea también Este contenido que construyamos sobre ello.
Consideraciones acerca de White Label para empresas interesadas
Después de entender cómo funciona, es importante que las empresas interesadas en la asociación de White Label también tengan en cuenta algunos puntos que pueden optimizar la experiencia y permitir que, de hecho, sea un negocio rentable.
Reputación de la empresa desarrolladora
Quién trabaja con tecnología sabe que el desarrollo de software requiere conocimientos específicos.
Por tanto, el primer punto a considerar por parte de la empresa que subcontrata un producto digital es la reputación de la empresa desarrolladora. Es fundamental conocer su trayectoria en el mercado, para identificar la calidad del producto que será entregado.
Siempre que sea posible, se recomienda consultar con los clientes y otros revendedores para asegurarse de que será un negocio confiable digno de una “asociación” entre las empresas.
Además, es válido que la empresa revendedora conozca en profundidad el producto y realice pruebas internas con el mismo, para asegurarse de que cumple con las expectativas.
Cerrar un acuerdo transparente
La transparencia es la consigna. Además de elegir un producto reconocido y validado en el mercado, el contrato debe ser de fácil comprensión entre las partes y con validez legal.
La principal información que debe registrarse son plazos, costos, condiciones, obligaciones y prohibiciones de ambas partes.
El modelo White Label es ventajoso tanto para la empresa promotora como para las empresas revendedoras, siempre que el acuerdo no sea imparcial, favoreciendo a un lado.
Mantener una buena relación también implica el intercambio constante de información y actualizaciones sobre el software y recomendaciones por parte de la empresa desarrolladora sobre cómo optimizar su uso.
Elección de un producto compatible con la empresa
Esta es una cuestión de sentido común por parte de la empresa revendedora. Al incluir una nueva tecnología en su cartera, la empresa debe estar segura de que tendrá sentido para su público objetivo.
De lo contrario, el producto tendrá baja aceptación y, en consecuencia, no generará beneficios.
Además de saber lo que busca el cliente, es importante respetar el segmento de la empresa e invertir en un producto compatible.
Posteriormente, también es válido planificar un precio final ventajoso. Este es también un gran beneficio de White Label, ya que la empresa no está “atrapada” a los ajustes preestablecidos del desarrollador.
Invertir en promocionar el producto de forma diferenciada, adaptándolo a la identidad visual de la empresa, también contribuye a la aceptación de la novedad por parte de los clientes y no deja lugar a asociaciones con la marca desarrolladora, cumpliendo con la premisa de personalización propia del modelo.
Y por supuesto, después de asegurarte de cómo funcionará todo, debes evaluar si la asociación de White Label es realmente la mejor opción para tu modelo de negocio.